domingo, 24 de febrero de 2013

Nunca te olvidaré.

Nunca te voy a olvidar, eres demasiado importante para mí, imprescindible en mi vida. Pase lo que pase, sea cual sea el camino destinado en nuestras vidas, tú siempre vas a ocupar un lugar en mi corazón, un lugar que nadie más podrá reemplazar. Un lugar que ya está reservado. 
Porque te quiero, porque te adoro... porque en estos momentos yo te amo... y me niego a perderte. No. No podría soportar tu ausencia... te necesito.


sábado, 23 de febrero de 2013

Soñar.

Desear inmensamente que llegue la noche para soñar. Soñar. Y así poder verte entre mis sueños. Verte. Verte me hace feliz.
Amo soñar contigo. Cuando despierto es como si un rayito de luz entrara por mi ventana al recordar tu rostro entre mis pensamientos. Eres hermoso. Una belleza. Una gran obra de arte hecha para que mis ojos te contemplen. Adoro tu mirada, tus lindos ojos del color del chocolate, intensos, dulces.
Me haces tanta falta... creo que se ha roto ya mi calma... quiero sumergirme en mis sueños para poder estar contigo un momento más... para no despertar jamás, sino quedarme atrapada por siempre junto a ti, en tus brazos. Por favor, no me sueltes, no sueltes mi mano... no me dejes caer al abismo. Ven, abrázame. Una vez más te extraño, te necesito.



viernes, 22 de febrero de 2013

Eres mi prioridad.

Nuestros desvaríos, nuestras locuras, nuestras risas, nuestras bromas... Cuando estás junto a mí siento que se me detiene el tiempo, me siento bien, en casa... no hay comparación, nada que me haga estar mejor que estar a tu lado, contigo.
Siento que explicar todo esto, este sentimiento, es prácticamente imposible. Eres tan importante para mí... no tengo las palabras adecuadas para explicarlo. Es como una admiración, una adoración, algo inmenso.
Y es que cuando me haces reír, o me sonríes, o me abrazas siento que me dirijo al cielo, al paraíso.
Gracias, gracias por hacer que me sienta especial a tu lado.
No sé cómo, ni cuándo, ni por qué... pero sucedió. Sucedió que te quiero más que a nada. Lo daría todo por ti.
Me enamoré... ¿qué como lo sé?, porque eres mi prioridad. Lo único que quiero es estar a tu lado.


jueves, 14 de febrero de 2013

Siempre voy a estar para ti.

Siempre voy a estar para ti. Siempre. Porque no importan las circunstancias, ni lo que pueda pasar... siempre voy a estar para ti. Estoy dispuesta a ayudarte, a apoyarte, en lo bueno y lo mano, no importa nada. No importa si estás conmigo, si yo puedo hacerte feliz, o si estás con cualquier otra chica... siempre estaré dispuesta a estar contigo.
Porque no importa la hora, ni el día, ni el lugar. No importa nada, porque yo siempre podré tachar todos los planes de mi agenda para estar contigo.


Rumbo a la felicidad.

Yo y mi querida cerveza, tú y tus típicas historias. Yo y mis emociones. Tú y tus sensaciones. Que si quieres, podemos compartir un domingo de resaca con una botella de agua, juntos en mi habitación. Si quieres te doy un abrazo a cambio de un beso. Que cualquier día te robo un beso y pido de rescate un millón mas. Te invito a ser feliz conmigo y esta vez pago yo. Que quiero coger contigo el próximo tren, rumbo a la felicidad...


miércoles, 13 de febrero de 2013

A soñar.

Mi cama me espera... me está invitando a soñar. Soñar en lo que más desee. 
Creo que lo tengo claro... Me voy a soñar contigo, a contemplar tu bella sonrisa. 
Buenas noches, mi amor... dónde quiera que estés. 
Nos vemos mañana.


14 de Febrero.

Y... llega el 14 de Febrero. Un día especial. Más que cualquier otro para quién está enamorado. Enamorado. Qué palabra tan hermosa.... proviene de otro conjunto de letras: amor.
Cuatro letras, un significado, un sentimiento, el corazón.
No todo el mundo ha tenido la suerte (o la desgracia) de estar enamorado. Se trata de un sentimiento puro, grande, infinito, intenso... tal vez no encuentre las palabras adecuadas para llegar a su digna definición... pero yo lo siento. Yo lo siento. Me enamoré.
Y sí, me enamoré. De él. La persona que es capaz de sacarme una sonrisa con tan sólo una mirada... cuando me mira a los ojos, siento que vuelo. Mi mente se convierte en un ligero pájaro que se encuentra libre, volando entre las nubes, sin preocupaciones, sin miedos, sin angustias. Esto me ocurre cuando está él, cuando me toca... con sus suaves, cálidas y hermosas manos... la calidez de sus manos. No creo que haya un lugar más tranquilo, seguro y agradable que encontrarse entre sus bellas manos.
Me enamoré... un día. No sé cómo, ni cuándo, ni por qué... pero ocurrió.

Mañana es 14 de Febrero. ¿Día especial?, quién sabe. No tengo idea de qué pueda ocurrir en un día tan importante... pero eso sí, me conformo con verle, con disfrutar del destello de su sonrisa.
Simplemente, esperaré la llegada de este día.


domingo, 10 de febrero de 2013

Te echo tanto de menos...

Y pasan los segundos, minutos, horas. Pasan los días. Irremediablemente pasa el tiempo, mientras yo me encuentro aquí, sin poder alejarte de mis pensamientos, de mi mente. Y es que siento algo que me quema... algo que quema mi interior y me pide volver a verte, observar tu lindo rostro, los detalles de tu cara... rozar tus cálidas manos. Siento que necesito tu presencia, verte... sonreír contigo. Y es que te extraño, te echo de menos.
No sé como evitar pensar en ti. Cuando me despierto, te conviertes en mi primer pensamiento del día; mientras que, cuando me meto en la cama, eres lo que más necesito en ese momento... quisiera tenerte entre mis brazos, acurrucarme en tu piel mientras te mimo, mientras nos acariciamos dulcemente... mientras te demuestro en cada momento lo mucho que te quiero... Pero me faltas, no estás aquí. Me duele, me duele mucho.

viernes, 8 de febrero de 2013

Lo que tiene que pasar, pasará.

Querer decir tanto y saber que es mejor no decir nada.
Quisiera expresar todo esto que llevo dentro... este sentimiento con el que vivo día y noche, recordándolo en a cada momento, él desplazándose entre mis pensamientos. Es tan grande mi sentimiento, qué me parece casi imposible describirlo con palabras, llegar a una digna definición... siento que soy incapaz de explicarlo.
No tengo idea de cómo, ni un cuando, ni siquiera un por qué... pero ocurrió. Ocurrió que le quiero más que a nada en el mundo, demasiado, como a nadie. Cuando escucho la palabra "felicidad", él se me viene a la mente, su nombre, su rostro, el calor de sus manos... es increíble lo que produce en mí.
Pero... no todo es cómo quisiera. Soy feliz por poder verle cada día, por que me dedique sonrisas o meras palabras... pero mi sentimiento me pide más, más de su parte. Un más que tal vez nunca tendré... Y al saber que no podré obtener ese "más", alguna parte de mi conciencia me pide un "no sigas con esto", un "olvídalo"... ¿Y cómo conseguirlo?... ¿habrá un cierto camino para llegar a esa meta?.
También influye una tercera persona... una bonita chica, simpática y sonriente que le hace sentir bien. Siento que me asfixio cuando le abraza o cuando sonríe con él. Es demasiado para mí. Aun así, no la odio... claro que no... le hace sentir bien, y su felicidad es lo que yo quiero... más que la mía. Quiero verle feliz.
Bueno, hay quién dice que lo que tiene que pasar, tarde o temprano pasará. No puedo ver el futuro, tampoco sé cuál es mi camino, ni qué debo hacer... sólo dejaré que pase el tiempo, él se encargará de poner a cada uno en su lugar.


jueves, 7 de febrero de 2013

Le quiero.

Le quiero. Le quiero. Le quiero mucho.
Es ver nuestras fotos del pasado Martes y delirar... te ves tan hermoso, tan bello... eres perfecto. Y es que las veo y recuerdo... recuerdo tus miradas, tus abrazos o tus palabras. Eres lo mejor de mi mundo.
Mañana volveremos a encontrarnos... presiento que será otro día especial, tal vez más que otros.


domingo, 3 de febrero de 2013

No puedo explicarlo con palabras.

Me preguntó en qué momento comencé a quererte de esta manera tan intensa.
Juro que, cuando te vi por primera vez, nunca me imaginé que ibas a ser tan especial para mí en un futuro... Ahora eres todo lo que sostiene la torre de mi vida... eres el camino por el que quiero caminar... eres mi sol brillante de cada día. Siento que no me imagino una vida en la que tú no estés, eres esencial para mí.
No puedo explicar con palabras lo que realmente siento por ti.

Mi sol, mi vida... mi todo.

viernes, 1 de febrero de 2013

Linda tarde.

Y se encontraba entusiasmada por que llegara la tarde. Entusiasmada, mucho. Pero entusiasmada no por que llegara el momento de la fiesta (que también), sino por su presencia. La presencia de él... estaría completamente a su lado durante unas horas... unas horas increíbles, repletas de risas, carcajadas y diversión... unas horas especiales, junto a él.
Feliz, feliz, feliz... feliz por verle, aunque cansada debido a la realización de varios exámenes... pero no son excusas.
Y llegó, llegó a la puerta de su casa, para así poder dirigirnos juntos a la fiesta. Al principio tardó un poco en llegar, pero no demasiado. Al verle, ella sintió que sus ojos se humedecían, mientras que su sonrisa se hacía cada vez un poco más intensa... ahí estaba. Ahí se encontraba tan hermoso como siempre. Se acercó a él, y dulcemente se aproximó a darle un beso en la mejilla.
Mientras caminaban cuesta abajo, ella no podía parar de observarle con atención, nunca puede evitarlo, es incapaz. No tiene ni idea de si alguna vez se habrá dado cuenta, pero no le importa... es su hobbie: observarle. A su vez, tiene unas ganas terribles de abrazarle, pero no se atreve por miedo a que pueda molestarle o qué pueda pensar... no sabe que ella siente algo increíblemente especial por él.
A lo largo de la tarde todo es diversión. Lo está pasando increíblemente bien... En uno de esos momentos, se encuentran ambos de pie... no pudo evitarlo, lo abrazó suavemente por detrás mientras él hacía lo mismo... así durante largos minutos.
Puede que ella se esté ilusionando demasiado, que llegue alto, caía debido a la gravedad de la Tierra y caiga fuertemente al suelo, pero no hay nada que hacer, no puede evitarlo... lo quiere, lo ama.